Impactante estudio en Brasil

Uso de bioinsumos en gramíneas ayudaría a reducir hasta 18,5 millones de toneladas de CO₂ al año

7 de October de 2024

Esta reducción representaría un ahorro de hasta US$ 5,1 mil millones al año en la adquisición de fertilizantes nitrogenados para la producción de cereales y pastos, de acuerdo a un estudio elaborado por la Asociación Brasileña de Bioinnovación y el Instituto Senai de Innovación en Biosintéticos y Fibras.

BiologicalsLatam

SUBSCRIBE TO OUR NEWSLETTER
A NUESTRO
NEWSLETTER

Una investigación realizada por la Asociación Brasileña de Bioinnovación (ABBI) y el Instituto Senai de Innovación en Biosintéticos y Fibras (SENAI CETIQT) de ese país ha revelado los beneficios económicos y medioambientales del uso de bioinsumos en las gramíneas, entre ellas cereales como el maíz, el trigo, y el arroz, y pastos como la caña de azúcar, como alternativa a los fertilizantes químicos.

El estudio señaló que la sustitución de los fertilizantes nitrogenados por bioinsumos asociados a la fijación biológica del nitrógeno y a la solubilización de fósforo y de potasio podría lograr una reducción de 18,5 millones de toneladas de CO₂ equivalente y un ahorro de hasta US$ 5,1 mil millones.

EN BUSCA DE UNA AGRICULTURA BAJA EN CARBONO

El objetivo de la investigación fue analizar posibles alternativas a los fertilizantes químicos para gramíneas, identificando las principales tecnologías consolidadas e innovadoras en el sector brasileño de bioinsumos, con miras a ofrecer subsidios para la implementación de estrategias y políticas públicas que impulsen su uso.

Otro de los propósitos fue presentar información que contribuya al establecimiento de proyectos que ayuden a reducir la dependencia del país a los fertilizantes importados y que fomenten el desarrollo de una agricultura baja en carbono.

Para ello, los investigadores de la ABBI y del SENAI CETIQT llevaron a cabo un análisis del mercado brasileño, revisaron artículos científicos publicados por grupos de investigación nacionales, examinaron el levantamiento de patentes registradas en el país y realizaron entrevistas con productores rurales y representantes de la industria.

FUERTE IMPACTO ECONÓMICO Y AMBIENTAL

Uno de los datos que constataron es la importancia cada vez mayor del mercado de fertilizantes en la agricultura brasileña, el mismo que para el 2024 se estimó en US$ 381,7 mil millones, con un crecimiento previsto de alrededor del 6% para el período comprendido entre 2024 y 2030. Más del 70% de las aplicaciones de estos productos ocurren en cultivos de soja, maíz y caña de azúcar.

Otro dato recogido fue que la mayoría de los fertilizantes son de origen mineral, siendo los principales la urea, los sulfatos y los nitratos de amonio, algunos compuestos de fosfato, el sulfato y el cloruro de potasio. El potasio es el principal nutriente usado en Brasil (38%), seguido del fósforo (33%) y el nitrógeno (29%).

Los investigadores constataron que el uso de los fertilizantes está aumentando los costos de producción de los cultivos. Para el cultivo del maíz, por ejemplo, el gasto en estos insumos representa alrededor del 30% del costo total. Adicionalmente, hay un impacto ambiental, ligado, principalmente, a la emisión de gases de efecto invernadero (GEI): según diversos estudios, los fertilizantes son responsables del 2,5% del total de emisiones de GEI, resultantes del proceso de síntesis, procesamiento y transporte, así como de las reacciones en el suelo tras su aplicación.

Otras consecuencias ambientales son la eutrofización de cuerpos de agua y el aumento de emisiones de óxido nitroso y dióxido de carbono. Solo en Brasil, en 2021, las emisiones de óxido nitroso procedentes de fertilizantes nitrogenados ascendieron a alrededor de 37,5 millones de toneladas de CO₂ equivalente.

UN MERCADO DE MIL INSUMOS REGISTRADOS

El estudio reseña que ante esta situación, el gobierno de Brasil ha puesto en marcha varias medidas para ampliar la producción nacional de fertilizantes de manera más sostenible, incluidas las autorizaciones de investigación y extracción de fosfato y potasio y la expansión de la producción de amoníaco a partir de gas natural.

Con más de 1.000 insumos biológicos registrados para los más diversos cultivos, Brasil ya es uno de los mercados de bioinsumos más importantes del mundo. La investigación recoge que solo en el 2021, la comercialización de estos productos generó alrededor de 3.000 millones de reales -más de US$545 millones-, de los cuales el 78% del valor estuvo relacionado con el uso de bionematicidas, bioinsecticidas y biofungicidas, mientras que el 22% estuvo relacionado con el uso de inoculantes para mejorar el crecimiento.

Según datos de la Asociación Nacional de Productores e Importadores de Inoculantes, el sector de inoculantes biológicos ha mostrado un crecimiento promedio superior al 14% anual, siendo el cultivo de soja el líder en el uso de estos insumos, con un 77% al año, seguido por el cultivo del maíz (16%) y el de caña de azúcar (2%).

Sin embargo, con el impulso de las medidas planteadas por el gobierno en el Plan Nacional de Fertilizantes 2050, se espera un fuerte aumento en el uso y oferta de nuevos productos, con las mayores innovaciones en el mediano plazo.

GRANDES ESCENARIOS DE DESCARBONIZACIÓN

El estudio de ABBI y SENAI CETIQT consideró los datos de una reciente encuesta hecha por McKinsey & Company (2022), según la cual el porcentaje promedio de adopción de biofertilizantes por parte de los productores brasileños es del 36% (escenario actual). Si se suma a este porcentaje a los que señalaron que planeaban usar estos bioinsumos, el porcentaje asciende al 42% (escenario futuro).

Tomando en cuenta estas cifras y las de áreas de cultivo correspondientes, así como otros datos, como los valores promedio de reducción en el uso de nitrógeno aplicado en el cultivo de estas gramíneas, los investigadores proyectaron varios escenarios de descarbonización.

En el escenario actual, con el 36% del área cultivada bajo el uso de biofertilizantes sustituyendo a los fertilizantes químicos, la reducción de CO² equivalentes al año sería de 7 millones de toneladas, mientras que en el escenario futuro, con el 42% del área, sería de 8 millones. Pero lo más saltante fue que en un escenario potencial, con el 100% de la superficie de gramíneas bajo el uso de esos insumos biológicos, el potencial de descarbonización sería de 18 millones de toneladas de CO² equivalentes al año.

Los investigadores también calcularon que, en el escenario potencial, el uso de estos inoculantes podría generar ahorros de hasta US$ 5.000 millones al año.

“Hasta ahora no teníamos esos datos consolidados, por lo que esta información podría impactar todo el proceso de bioinnovación para Brasil, ya que, al reducir la importación de fertilizantes del exterior, habrá un estímulo para el desarrollo de esas tecnologías en el país”, señaló el director de Asuntos Regulatorios y Científicos de ABBI, Marcos Pupin, durante la presentación del estudio.

Por su parte, la coordinadora general de Bioeconomía del Ministerio de Agricultura de Brasil, Valéria Martins, celebró la alianza entre su institución, la ABBI y el Instituto Senai de Innovación en Biosintéticos y Fibras, que posibilitó el hallazgo de estos resultados. “El resultado fue fantástico desde varios ángulos y seguimos juntos, porque ahora comienza el trabajo, ya tenemos los subsidios y trabajaremos para implementar las estrategias propuestas por el estudio para lograr los escenarios previstos”, subrayó.

*Puede revisar el estudio en detalle en este enlace.

SUBSCRIBE TO OUR NEWSLETTER

Related News

About us

To request more information or send communications about biologicals, write to biologicalslatam@redagricola.com.   

Biologicals Latam is a quarterly digital magazine of Redagrícola that informs in a specialized way about the intense activity that is being developed in the area of bioinputs for agricultural production. This publication is a complement to the Online Course of Biostimulants and Biocontrol and the Congress that this media group organizes around the subject.