El equipo científico de BacBio ha determinado que la proteína amiloide TasA, necesaria para el ensamble de las comunidades bacterianas llamadas ‘biofilms’, también previene la muerte la célula baceriana, pero preservando la integridad de la membrana de la célula. Es decir, tiene un papel complementario al meramente estructural, lo cual se refleja en la adaptación de Bacillus subtilis a la superficie de las plantas, donde contribuye a combatir el ataque de patógenos.
“El hecho de que estas proteínas estén ampliamente distribuidas en el mundo microbiano, abre la posibilidad a que en otras especies bacterianas estén desempeñando un papel de estabilización de la integridad celular, o, al menos, un papel diferente y complementario al inicialmente observado en cada uno de esos sistemas”, aclara el investigador Diego Romero, autor principal del trabajo y quien también pertenece al Instituto de Hortofruticultura Subtropical y Mediterránea La Mayora (IHSM).
El laboratorio Bacbio trabaja en el estudio de la fisiología de las bacterias, así como su interacción con el entorno. Las cucurbitáceas conforman otra de sus líneas prioritarias de estudio.
Referencia bibliográfica:
Cámara-Almirón, J., Navarro, Y., Díaz-Martínez, L. et al. Dual functionality of the amyloid protein TasA in Bacillus physiology and fitness on the phylloplane. Nat Commun 11, 1859 (2020). https://doi.org/10.1038/s41467-020-15758-z